Tulum
Es uno de los destinos más visitados de la Rivera Maya con más de dos millones de personas al año. Tulum, que en maya significa fortaleza, son unas de las ruinas mayas más bonitas que existen. El pueblo situado cercano a las ruinas que posee numerosas tiendas y hoteles también se llama así.
La zona arqueológica está abierta de 7h a 17h pero conviene estar allí antes de las 10 para evitar las aglomeraciones que se forman cuando empiezan a llegar los autobuses procedentes de todas las zonas de la Riviera Maya.
Las ruinas de Tulum se ven en poco tiempo, ya que no son ni mucho menos las más grandes (un rectángulo de unos 400 metros de largo por 200 de ancho). Las murallas que en algunos lugares superan los 5 metros de altura indican que se trataba de una población fortificada.
El edificio más grande y famoso es el Castillo, está emplazado al borde de un enorme acantilado justo detrás de uno de los templos. Parece que su función era defensiva y de vigía, para prevenir posibles ataques por mar. Debajo del acantilado donde se situa el Castillo se encuentra una preciosa cala de arena blanca y un agua de tonos verdes y azules que es la imagen más característica de estas ruinas mayas.
A lo largo del recinto se encuentran varios templos mayas construidos por los artistas mayas más inteligentes de la época. El templo del Dios Descendente, el de la Serie Inicial y el de los Frescos fueron construidos en honor a los dioses mayas y en sus paredes podemos admirar las grabaciones donde aparecen representados estos dioses.
Tulum es una excursión obligada en la Riviera , aunque si habeis visitado ya otras ruinas éstas os pueden parecer pequeñas. Aun así vale la pena subir al Castillo con el fin de admirar el alucinante Mar Caribe y sentir la magia de Tulum. Si éstas son vuestras primera ruinas prehispánicas quedaréis encantados.
En el pueblo de Tulum también encontrarás alojamiento si lo deseas, así como numerosas tiendas de artesanía, con ropa, collares y pendientes de plata, cerámica… Verás que es todo carísimo, así que si te encaprichas de algo, regatea.